Está en constante evolución, sacando soluciones a los fallos de seguridad y tiene la ventaja de que los propios usuarios pueden crear extensiones para realizar miles de acciones.
Cuando creía que nadie podía superar a Firefox, apareció Chrome, el navegador de Google. Y efectivamente, le hacía sombra: potente, ligero y con una gran velocidad. Sin embargo tiene truco: Chrome va rapidísimo para las páginas de Google, repletas de javascript que han creado ellos y que es especialmente interpretado por su motor de Chrome. De esta manera páginas como google maps o gmail, van mucho más rápido que en firefox.
Ya son varias las ocasiones en las que me he querido cambiar a Chrome y dejar de lado firefox, pero siempre encuentro sus problemas y eso me echa para atrás y me hace volver a firefox, al que tengo especial cariño y en el fondo no quiero dejar.
Para que no se me olvide en el futuro, aquí está la lista de cosas que no me gustan en Chrome:
- Falta de seguridad. Como navegador es bastante seguro, no menos que firefox, pero a la hora de guardar los datos de los usuarios deja mucho que desear. Ambos navegadores te permiten guardar contraseñas de las distintas páginas, lo cual es una gran ventaja en un uso diario. Estas contraseñas pueden ser vistas desde la configuración del navegador, y aquí está la diferencia: Firefox te permite configurar una contraseña maestra con la cual tendrás acceso al resto de contraseñas guardadas. Si un usuario abre el navegador y no pone la contraseña maestra, es como si no hubiera ninguna contraseña guardada, lo cual está muy bien para evitar que cualquier acceda a tu correo o cualquier otra página. Chrome no tiene esta opción de manera que CUALQUIER USUARIO que abra el navegador podrá acceder a las páginas con contraseñas guardadas. Y no solo eso, a través de las opciones de configuración, podrá ver las contraseñas.
Este es el principal motivo por el que no uso Chrome - Perfiles. En Firefox se pueden crear distintos perfiles, en los que guardarás tus extensiones, contraseñas, favoritos... Chrome ha incluido una opción últimamente para cambiar de usuario, pero no tiene la misma potencia y no se puede configurar para iniciar el navegador como ese usuario automáticamente. Además, volviendo al punto anterior, no permite proteger dicho perfil con contraseña por lo que es un poco tontería lo de los perfiles, tiene cierta utilidad pero no toda la que se le podría sacar.
- Falta de extensiones. Bien, esto ha sido solucionado, al menos en parte: al inicio de Chrome no había extensiones en absoluto. Luego aparecieron algunas, pero con opciones muy limitadas porque las APIs de Google no permitían acceso completo a las opciones. Ahora mismo ya hay más opciones y han surgido también gran cantidad de extensiones para el navegador. De todas formas Firefox le saca años de ventaja en el tema de las extensiones y aunque como digo esto ha cambiado, en firefox se encuentran extensiones para hacer casi cualquier cosa.
- Monopolio. Google sabe más de mi que yo mismo. Eso a veces me asusta. Además, de seguir a este ritmo, no habrá cosas que no sean Google. Como he dicho Firefox me parece un proyecto fantástico y quiero seguir dándole mi voto de confianza. Por tanto, usemos algo más que no sea de Google que está colapsando el mercado... en general! Además, hacen sus sitios para que funcionen mejor con Chrome lo que en cierto sentido es trampa pues una de dos: te obligan a instalar su navegador o a que te funcione un poco más lento y esa actitud no me gusta.
No dudo que Chrome tiene muchas ventajas, pero amigos, mientras no mejoren esos aspectos de seguridad, ni me planteo cambiarme.
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